Vicente Fernández aseguró que el peligro ya pasó y que
este viernes podría abandonar el hospital de Guadalajara en donde fue
internado el martes pasado, tras sufrir una trombosis pulmonar.
En entrevista en el noticiero de Joaquín López Dóriga,
Fernández dijo con cierta dificultad que enviaba un saludo muy cariñoso a todos sus admiradores que se han preocupado por su salud.
El periodista le informó a
Vicente haber
recibido tuits de México, Centro, Sudamérica, Estados Unidos y España
manifestándole su preocupación por lo que le sucedió.
Cuestionado
por López Dóriga sobre cómo es que fue a parar al hospital, Vicente
comento: "el sábado pasado iba subiendo las escaleras de mi casa, luego
de nadar, y mi doctor (Roberto Esquivel), que siempre está a mi lado, me
dijo: 'señor le escuché un zumbido en la garganta y lo noto muy
agitado'".
Fue entonces que el médico de cabecera le indicó a
Vicente Fernández que
al día siguiente estaría en su rancho de Guadalajara el doctor Rodolfo
Parra, el cardiólogo que está pendiente cada vez que lo han operado y lo
pondría al tanto.
"Ya ves cómo es esto y me metieron como a cinco
aparatos que son bien ruidosos; entonces el doctor me dijo que me iba a
ir en silla de ruedas hasta mi camioneta para trasladarme al
sanatorio".
"La verdad yo no me daba cuenta porque esta
enfermedad no se siente, pero es de ya; de repente me dice que si yo me
regresaba al rancho los primeros tres días de estos síntomas son muy
críticos".
Vicente Fernández comentó entonces a López Dóriga que
su médico le advirtió que si se regresaba al rancho ya no llegaría vivo,
por eso accedió internarse.